Rehabilitación de la fachada de un edificio
El Eixample de Barcelona está lleno de preciosos edificios neoclásicos con más de 100 años de historia. Muchos de ellos, sin embargo, presentan deficiencias graves tanto interiores como sobre todo exteriores debido a una falta de conservación.
En este caso, el trabajo que nos llegó consistía en rehabilitar las fachadas y balcones de la calle (que presentaban grietas importantes), así como la fachada de uno de los patios y los techos de algunos interiores.
Los propietarios de la finca decidieron que, en lugar de hacer una reparación superficial (que hace aflorar las patologías pocos años más tarde), la intervención tuviera la máxima durabilidad posible. Es por ello que nuestro trabajo no consistió en un simple “lavado de cara”, sino que incidió también en las causas de las patologías que presentaba el edificio. Esta mayor inversión ha supuesto un ahorro a largo plazo y una mayor seguridad para los vecinos y peatones.